“Una
campaña es un conjunto de eventos programados para alcanzar un objetivo. Una
campaña se diseña, como parte de una estrategia, para lograr un conjunto de
objetivos y resolver algún problema crucial. Lo que hace que un grupo de
mensajes constituya una campaña es su origen en una misma estrategia” (Simeón Cañas, 2005). Actualmente, todas las personas
están expuestas a un sin número de campañas publicitarias que tienen como fin
vender productos o servicios, sin embargo hay un tipo de campañas que están un
poco fuera de este contexto tradicional y hacen parte de lo social, el cual
busca como fin único dar a conocer una idea, sensibilizar las conciencias y los
corazones de las personas en pro del bien social.
Tanto
la campaña comercial como la social tienen como objetivo principal la comunicación de “algo”, la cual tienen como
fin informar, persuadir y generar recordación en las personas que la ven y/o
escuchan, de allí que es muy importante realizar una buena selección e
identificación del público objetivo, para poder saber cómo impactar de una
forma eficaz y porque medio hacerlo de una forma más óptima y segura.
El
desarrollo de una campaña social lleva como componente principal entender muy
bien la relación del marketing tradicional con el social, en la medida en que
tienen los mismos elementos entendidos desde diferentes perspectivas. Es decir,
si en una campaña comercial como es la de Adidas como patrocinador oficial del
mundial 2010 se hace énfasis en la presencia de la marca en el balón de futbol
(como producto) y en una campaña del Ministerio de Defensa de Colombia se pone
como sello de este mismo elemento (balón de futbol) un adhesivo con el texto
“Desmovilícese, vuelva a jugar” (idea), donde lo que se busca es llegarle a
todas las personas que hacen parte del conflicto armado a que se reintegren a
la vida en sociedad; se evidencia como un mismo elemento transmite diferentes
posturas, en uno como producto y en otro como idea. Éste es un ejemplo de cómo
la comunicación persuasiva se refleja y se identifica según sea su fin.
De
igual forma que en la campaña comercial, en la social la idea debe ser
tangible, debe ser visible o asociativa ya sea por medio de la representación
física o simbólica, en donde quien promueva deje muy claro cuál es el fin de su
mensaje, cuál es su beneficio, y donde se exponga que el precio al que se alude
va más allá de lo monetario, pues se está representando es un esfuerzo moral o
conductual donde cambiar las ideas o pensamientos van de la mano de creer en lo
que se está haciendo.
Continuando
con el ejemplo anterior de la campaña colombiana del Ministerio de Defensa,
podemos ver esta serie de componentes desde el momento mismo en que se empieza
a accionar la campaña con una serie de eventos donde se le demuestra al público
de una forma emotiva y racional que sí se puede volver a hacer parte de una
familia, de una sociedad, de un país o en este caso de un “equipo”. En estas
campañas sociales, no se hace referencia a un lugar de ventas pues “implica
ubicar el producto en el lugar indicado para el adoptante objetivo; por ello se
entiende por plaza aquellos lugares a través de los cuales se hará la
distribución, o se tendrá contacto con los adoptantes objetivos” (Muñoz Molina,
2001); en nuestro ejemplo citado se observa que el territorio colombiano, la
selva y todos los lugares patrióticos hacen parte de la plaza de dicha campaña,
en la cual se pretende llegar a un público que se encuentra en los lugares más recónditos
del país.
Haciendo
un recuento de todo lo anterior y de lo que se comentó al principio de este
escrito podemos ver entonces que las campañas de la línea de marketing
tradicional y la de la línea de marketing social son manejadas de la misma
forma, bajo los mismos conceptos de las cuatro “pes”, sin embargo se toman
desde perspectivas diferentes ya que tienen un fin igualmente diferente y su
proceso de creación y divulgación desde la idea, la estrategia y la comunicación
van encaminadas en diferentes direcciones. No olvidemos que las campañas
sociales van más allá de lo material y de lo comercial, pues buscan siempre
estar en pro de la sociedad sin hacer distinción de color, cultura o corazón;
es entonces trabajo de quien comunica lograr que todo esto se cumpla, llegue en
pleno a los diferentes públicos, es decir que siempre sea efectivo, llevando siempre
una línea creativa.
Muñoz Molina, Y. (2001). El Mercadeo Social en Colombia. Medellín. Fondo Editorial Universidad EAFIT.
DEFINICIÓN DE CAMPAÑAS Y NORMAS QUE RIGEN A UNA CAMPAÑA. Taller de Campañas de Comunicación. Febrero de 2005. En http://www.uca.edu.sv. José Simeón Cañas.
Influencia del componente emocional y cognitivo en la formación de la actitud hacia la marca. Septiembre 9 de 2008. En http://proyectocomunicacion.wordpress.com/2008/09/09/influencia-del-componente-emocional-y-cognitivo-en-la-formacion-de-la-actitud-hacia-la-marca/. Fernandez, Cristobal; Cea, Jorge; Dominguez, Claudia.
Tipologías de campañas publicitarias. Junio de 2008. En http://www.slideshare.net/viahumana/tipos-de-campaa-presentation. Claudio Covacevich.
Guerrillero: Su familia y Colombia lo esperan para hacer un solo equipo. http://www.youtube.com/watch?v=tN7YVZ4PWd4. Julio 11 de 2011. MindefensaColombia.